Reações Diferentes Ao Mesmo Estímulo

Professor DeRose @ Learn DeROSE
2 minutos

17 de sep 2021 06:22

Intentar justificar tu comportamiento culpando a alguna circunstancia o persona no es una excusa coherente. Reaccionarás según tu educación, tus neurosis, miedos y expectativas. Para ilustrarlo, he creado la siguiente parábola:

Una vez, un Maestro hindú quiso demostrar que las reacciones emocionales no se debían a los acontecimientos que las desencadenaban, sino a lo que cada persona ya llevaba dentro. Eligió a tres discípulos cuyas personalidades conocía bien. Ordenó a los tres que pasaran al frente de la clase y se arrodillaran ante él. Abofeteó con fuerza a cada uno. El primero se indignó y se marchó enfadado, diciendo que el Maestro no tenía derecho a pegarle delante de la clase. El segundo se entristeció y lloró. El tercero dijo ¡Gracias, Maestro!.
El estímulo había sido el mismo: una bofetada. Pero las reacciones de los tres fueron diferentes: enfado, tristeza y gratitud. ¿Cuál es la explicación?
Porque cada uno respondió con lo que tenía dentro. Los que estaban enfadados reaccionaron con ira. Los que estaban tristes reaccionaron con tristeza. Los que estaban agradecidos reaccionaron con gratitud. Lo importante nunca es el acontecimiento en sí. Es el pretexto, el excipiente[1] para sacar lo que cada uno tiene en su carácter.

Cuando alguien choca contigo y te derrama el café, la causa principal de que se te haya derramado el café no ha sido el choque, porque si hubieras estado bebiendo té, no se te habría derramado el café. Cada vez que la vida choca contigo, derramas lo que hay en tu taza por todo el mundo.

[1] Un excipiente es una sustancia farmacológicamente inactiva que se utiliza como vehículo para el principio activo.

Del libro Cambia el mundo, empieza por ti,
Profesor DeRose, Egrégora Books.